El Nobel de Medicina 2014 ha premiado a un científico estadounidense, John O’Keefe, y a dos noruegos, el matrimonio formado por May-Britt y Edvard I. Moser, por revelar el «GPS interno» del cerebro, las células que constituyen el sistema de posicionamiento que hace posible la orientación en el espacio. –
Los hallazgos del estadounidense John O’Keefe y el matrimonio formado por May-Britt y Edvard I. Moser han supuesto un cambio en el paradigma de la comprensión de funciones cognitivas superiores y abierto nuevas vías para entender el funcionamiento de la memoria, el pensamiento o cómo hacer planes, señala el Instituto Karolinska.
Recientes investigaciones han mostrado que esas células existen también en seres humanos, por lo que el conocimiento del sistema de posicionamiento cerebral podría ayudar a entender la pérdida de memoria espacial de los enfermos de Alzheimer, añade en su fallo esa institución con sede en Estocolmo, que otorga cada año el galardón.
La cuestión de cómo el cerebro crea un mapa espacial y navega en el medio ha ocupado la atención de pensadores y científicos durante siglos y también fascinaba a O’Keefe cuando hacía sus estudios de postdoctorado a finales de la década de 1960.
Usando métodos neuropsicológicos O’Keefe descubrió en 1971 que cuando una rata se encontraba en un lugar determinado de una sala, siempre se activaba un tipo de célula en el hipocampo, una de las principales áreas del cerebro humano y de otros mamíferos.
Esas células no sólo registraban un impulso visual, sino que construían un mapa interno del medio, por lo que concluyó que el hipocampo genera múltiples mapas representados por la actividad colectiva de las células activadas en diferentes lugares.
Tres décadas después, mientras trabajaba con las conexiones en el hipocampo de las ratas, el matrimonio Moser descubrió en la corteza entorrinal, un área cerebral vecina, otras células que se activaban cuando los individuos pasaban localizaciones múltiples dispuestas en una red hexagonal.
Cada célula se activaba en un modelo espacial único y en conjunto formaban un sistema de coordenadas que permitía la navegación, a la vez que creaban circuitos con las células del hipocampo, constituyendo ese «GPS interno» del cerebro.
Los protagonistas
Los galardonados compartirán el premio de 8 millones de coronas suecas (879.000 euros, 1,1 millones de dólares), dividido en dos partes iguales, una para O’Keefe y la otra para los Moser -el quinto matrimonio en ganar un Nobel-, según ha decidido el Karolinska.
O’Keefe (Nueva York, 1939), que también posee la nacionalidad británica, se doctoró en psicología fisiológica en la Universidad de McGill (Canadá) en 1967, y amplió estudios en el University College de Londres, institución en la que sigue ejerciendo.
May-Britt Moser nació en 1963 en Fosnavåg (Noruega) y estudió psicología en la Universidad de Oslo junto a quien se convertiría en su marido, un año más joven y natural de la vecina localidad de Ålesund.
Ambos se doctoraron en neurofisiología por la Universidad de Oslo en 1995 y ampliaron estudios en la de Edimburgo (Reino Unido), para trasladarse luego a la Universidad de Ciencias y Tecnología de Trondheim (Noruega), donde ejercen desde 1996.
O’Keefe y los Moser suceden en el palmarés del premio de Medicina a los estadounidenses James E. Rothman y Randy W. Schekman y el alemán Thomas C. Südhof, ganadores el año pasado por sus descubrimientos de la maquinaria que regula el tráfico vesicular.
La ronda de ganadores de los premios Nobel continuará mañana con el de Física, y seguirá los días siguientes, por este orden, con los de Química, Literatura, de la Paz y Economía, que se dará a conocer el lunes de la semana siguiente.
Los Nobel se entregan todos los años el 10 de diciembre, aniversario de la muerte de Alfred Nobel, creador de los premios, en una doble ceremonia en Oslo, para el de la Paz, y en Estocolmo, para los otros cinco galardones.
2014-10-05